Los representantes de la Coordinadora Ah hoc del Agua y la Federación de Juntas Vecinales (Fejuve) expresaron ayer su molestia por el racionamiento de agua que sufren la zona central y sur.
Explicaron que en la zona central el turril de agua se comercializa en 35 bolivianos; en cambio en el sur las cisternas ya no transitan con regularidad, porque prefieren comercializar el líquido en el norte.
“Nos sentimos engañados con Misicuni, es como un globo que se ha inflado y ahora se ha reventado, pensábamos que el agua iba a llegar pero a la fecha seguimos sufriendo el racionamiento”, dijo el representante de Fejuve, Nelson Álvarez.
Ante esta situación, la asambleísta Lizeth Beramendi solicitó la renuncia del presidente de la Empresa Misicuni, Jorge Alvarado, y del gerente de Semapa, Gamal Serhan. “Estas dos personas deben renunciar por su incapacidad, han convertido el agua en un tema político y la población sigue sin agua”, deploró.
Beramendi lamentó que a pesar de tener agua acumulada en la presa de Misicuni, ésta no llega a la población por falta de ductos.
El presidente de la Asociación de Ingenieros Eméritos de Cochabamba (Asieme), Gonzalo Maldonado, dijo que el componente riego del Sistema Misicuni no funciona, porque se entregan 80 litros por segundo por el plan inmediato.
El representante de los regantes de El Paso en Quillacollo donde está emplazada la hidroeléctrica, Manuel Castro, indicó que su sector se debe beneficiar con riego, pero a la fecha no accede al agua por lo que gestionan construir otra aducción con 7 millones de bolivianos.
Semapa
Serhan indicó que ayer comenzaron a recibir 400 litros por segundo de Misicuni. “El agua llegó sin ninguna novedad”.
Fuente: Los Tiempos