EL DIARIO. 8 DE ABRIL DE 2014 Regantes se declaran en emergencia, para no permitir la aprobación de la ley minera. Oruro, (EL DIARIO).- Los mineros cooperativistas utilizan agua en forma indiscriminada, tanto del subterráneo, como de las vertientes naturales, “sin pagar ni un centavo o, por lo menos, no existe en ninguno de los artículos del proyecto de ley minera, algo que se refiera a un arancel por el consumo de agua”. El director del Centro de Ecología y Pueblos Andinos (CEPA), Gilberto Pawels, dijo que tampoco se especifica “la reposición del agua utilizado y no habla de las plantas de tratamiento de las aguas residuales” que provocan contaminación de las tierras y aguas que necesitan los productores agrícolas y ganaderos. La declaración fue emitida a propósito del proyecto de ley minera que fue suspendido en su aprobación en la Cámara de Senadores, después del paro de actividades y bloqueo de caminos que se prolongó por cinco días, la pasada semana, por decisión de los cooperativistas mineros que exigen la aprobación de esa norma jurídica. “El proyecto de ley minera no ha sido consensuado con los sectores involucrados. Los recursos naturales son de todos los bolivianos y bolivianas y, por eso, es necesario socializar el documento para que todos conozcan los problemas que podría provocar la ley, porque se persiste en promover la privatización, el uso y aprovechamiento indiscriminado de agua superficial y subterránea”, explicó Pawels. La norma tampoco considera una “consulta previa en ninguna de sus partes, para el uso o desvío del agua, por parte de los operadores mineros, que afecta a las comunidades indígenas, por el uso indiscriminado del líquido”. Pawels dijo que las comunidades afectadas por la contaminación se han declarado en emergencia y, en caso necesario, si se aprueba el proyecto de ley, tal como ha sido presentado, “tomarán medidas de hecho, porque atentan a los derechos de las comunidades”. El representante de los regantes, Martín Feliciano, dijo que el rechazo al proyecto de ley es contundente, a nivel nacional, porque “no ha sido consensuado con los bolivianos, menos con los productores agropecuarios, que deben ser los primeros en conocer un documento de tanta importancia para el país”. Dijo que para los productores agropecuarios “es vital la preservación de las aguas subterráneas y de los ríos, pero si se sigue fomentando la contaminación, se atentará contra la vida de las personas y de los animales, se destruirán las tierras fértiles y se terminará con los alimentos que necesita el país”.